jueves, 7 de mayo de 2009

Las oportunidades perdidas de la UNI

Hace unas semanas hice llegar un comunicado a los miembros de nuestra comunidad UNI en el que hacía referencia a la necesidad de iniciar el debate en torno a las propuestas para la dirección de nuestra universidad en el periodo 2009 – 2014, a través de las siguientes acciones: la convocatoria a Asamblea Universitaria Extraordinaria para la modificación del estatuto UNI que permita la creación de la Escuela de Posgrado, la conformación de una comisión investigadora y sancionadora sobre el caso del reconocimiento indebido del grado de maestro del decano de la Facultad de Ingeniería Económica y Ciencias Sociales y elección de los representantes estudiantiles en elecciones justas, amplias y democráticas.

El actual rector, quien representa a la ya desgastada alianza entre algunos docentes de las listas B y C, mostrando una vez más su total desconocimiento sobre el tratamiento de los temas académicos y administrativos de la UNI, realizó una convocatoria a asamblea universitaria ordinaria con serios vicios legales.

En lugar de desplegar una gestión autocrítica y propositiva, con esta acción el actual rector dejó pasar la oportunidad que se le presentaba para que de alguna manera se suplieran los graves errores y omisiones que ha mostrado en su gestión durante el año 2008 y lo que va del 2009. Prueba de ello son las demoras en proseguir con proyectos que se dejaron listos para su elaboración y/o ejecución; hecho que ha obligado a la UNI a solicitar plazos adicionales ante el ministerio de economía para no tener que devolver el dinero presupuestado y asignado a dichos proyectos de inversión. Se trata de proyectos de infraestructura como el de: La Nueva Biblioteca Central, el Sistema de Riego Tecnificado, el Mejoramiento de la Red de Energía Eléctrica, así como el Edificio para Posgrado en el local del INICTEL UNI, el proyecto de Mejoramiento del Sistema de Agua y Alcantarillado entre otros.

Si se hubiese trabajado con diligencia estos proyectos actualmente estarían beneficiando a miles de estudiantes y docentes. Sin embargo se ha preferido realizar viajes, giras al extranjero, ceremonias, que en los hechos no han representado mayor beneficio a la institución. El sentido común nos indica que en momentos de crisis es necesario priorizar los gastos y atender los proyectos de gran impacto para el avance académico de la UNI. Ello no ha sucedido con la gestión del actual rector.

Durante las últimas semanas he sido convocado por profesores de base y sostenido reuniones con colegas líderes de nuestra universidad. De todo ello he podido recoger, por un lado, la demanda y sentimiento que nuestra UNI retome de manera convincente y sostenible el camino hacia su consolidación como institución líder en los campos de ciencia y tecnología. Y, por otro, el rechazo expreso a la forma como se viene conduciendo a la universidad, con actitudes populistas y de un clientelismo que creíamos desterrado de nuestra universidad. Se cree que con el ofrecimiento a los miembros docentes asambleístas de cargos y favores en la administración de las oficinas y empresas de la universidad, dedicándose a desprestigiar los logros conseguidos hasta el 2007 se puede elegir a un rector cuyas capacidades para dirigir a la UNI, son cuestionables.

Toda elección debe ser un acto escrupulosamente democrático y una oportunidad para que todos nos involucremos con los problemas y posibilidades de nuestra centenaria UNI. Por eso reiteramos nuestra demanda: que se debatan las propuestas para la nueva dirección de la UNI.

Arq. Luis Cabello Ortega

Estimados miembros de la Comunidad UNI Abril 2009

1 comentario:

  1. Hasta que alguien tuvo el valor de decir lo que viene sucediendo en la UNI. Esperemos tenga eco en la comunidad y se logre debatir las propuestas para la gestión 2009-2014.

    ResponderEliminar